Vicerrector Manuel Aranguren exigió reposición del servicio

Jorge Augusto Rodríguez / CNP: 14129. Considerado como uno de los ataques más infames e inhumanos que haya recibido la Universidad de Los Andes (ULA) en los últimos tiempos, el vil corte de servicio de agua en el Edificio Administrativo va encaminado a su primer mes, dejando sin áreas sanitarias disponibles y de consumo vital, a más de 600 trabajadores y un número similar de visitantes que diariamente acuden a sus instalaciones; todo porque la empresa Aguas de Mérida tomó la drástica determinación de cercenar ese derecho humano alegando que les debían las facturas de cobro, sin tomar en cuenta que no es la ULA la deudora sino el mismo gobierno nacional quien debe pagar a través de la Oficina de Planificación del Sector Universitario (Opsu).